Un nuevo estudio destaca que los “milenials parents” (los padres del 2000, entre 25 y 34 años) afirman que sus hijos se han convertido en sus mejores amigos y destacan que cuentan con su opinión en las decisiones familiares cambiando el sistema tradicional de jerarquía familiar en el que los padres decidían y los hijos acataban.

La investigación, realizada por Lightspeed GMI y The Familiy Room LLC en Estados Unidos, pone de relieve que el 54% de los padres describen a sus hijos como “uno de sus mejores amigos”. De hecho, como apunta el estudio las relaciones entre padres-hijos son más de amigos que autoritarias.

George Carey, director de Family Room destaca “hemos visto crecer a los que ahora son los padres del 2000. Ahora ellos son quienes se casan y formas nuevas familias. Este estudio nos ofrece una sorprendente y fascinante perspectiva de cómo sus valores generacionales de adultos jóvenes son trasladadas al seno de sus familias”.

Otra de las características de estos padres, aunque muy pocos lo pueden poner en práctica, es que piensan que “si el padre o la madre pueden estar en casa con los hijos esto es mucho más beneficioso para su crecimiento”. Como apunta el estudio, muchos de estos padres se criaron junto a alguno de sus padres, ya que no ambos trabajaban durante su infancia y esta experiencia les ha trasmitido beneficios positivos que les gustaría poder inculcar a sus hijos. Por ello uno de sus principales deseos es trabajar en horarios que faciliten la conciliación laboral y familiar.

Estos “milenial parents” son además defensores del juego para los niños. Saben la importancia que éste tiene para el desarrollo y crecimiento de los niños, por lo que intentan jugar con sus hijos siempre que les es posible.

Fuente: The Whasington Times