Llena tu casa de Navidad
Con la llegada de una de las épocas del año que más gusta a niños y mayores, la Navidad, nuestras casas se llenan de luces de colores, guirnaldas, árboles, belenes, dulces… todo ello para ambientar nuestro hogar y celebrar la Navidad. Pero ¿te has preguntado alguna vez de donde surgió esta costumbre? ¿Por qué empezamos a decorar un árbol? ¿Por qué ponemos un belén en casa?
El árbol de Navidad es una de las costumbres que se remonta más atrás en el tiempo. Cuando los primeros cristianos llegaron al norte de Europa observaron que sus habitantes celebraban el nacimiento del dios del Sol, cercana a la fecha de la Navidad, decorando un árbol que simbolizaba el Árbol del Universo. Con la evangelización de esta zona, los cristianos adoptaron esta tradición decorando el árbol con manzanas (simbolizando el pecado original) y velas.
Como veréis esta decoración se ha modernizado con el paso de los años y ahora encontramos multitud de elementos decorativos para nuestro árbol. Los imprescindibles: estrella (colocada en la punta superior del árbol), esferas (que guardan relación con las primeras manzanas decorativas), lazos y luces (en relación a las primeras velas).
El belén representa el nacimiento de Jesucristo en Navidad. El primero son montó en 1223 y fue San Francisco de Asís quien lo realizó y cuyos únicos protagonistas eran los presentes en el portal. En el siglo XV se generalizó la costumbre del belén y poco a poco surgieron nuevas figuras y protagonistas para el montaje como pastores, lavanderas, soldados, animales de ganadería….
Y si os estáis preguntando por otra de las figuras típicas del belén, la figura del “caganer”, esta tradición surgió en Cataluña y hace referencia a cultos agrarios relacionados con la fertilidad del campo.
DECORACIÓN NAVIDEÑA EN LAS CALLES
Fue ya en el siglo XX cuando la decoración navideña traspaso las paredes de los hogares y tomó también las calles. Aquí las principales protagonistas son las cientos y miles de bombillas que con su luz de diferentes colores llenan de alegría las calles de diferentes ciudades.
Aunque no podemos olvidar decoración urbana tan famosa como el árbol de navidad del Rockefeller Center de Nueva York, cuya iluminación ya se ha convertido en todo un evento para los neoyorkinos.