¿Pasan demasiado tiempo entre “pantallas”?
Esta es la pregunta planteada por un estudio realizado por “Make Time 2 Play”, la campaña de la Asociación de Fabricantes de Juguetes Británica, que ha afirmado que los niños pasan demasiado tiempo jugando en realidad virtual y muy poco en el mundo real.
En este estudio ha colaborado también el especialista en educación, el doctor Aric Sigman quien reconoce que “El juego real es de vital importancia para el desarrollo de los niños y es necesario que el juego se reconozca como algo más que sólo un entretenimiento divertido”.
En este estudio en el que se ha entrevistado a alrededor de 2.000 padres en Reino Unido, un tercio confirmaba que sus hijos relacionaban la idea de juego con la tecnología en lugar de hacerlo con el juego tradicional. De hecho el 80% de los padres aseguraba facilitar una pantalla virtual a sus hijos para el juego, frente al 20% que preferían que sus peques jugasen al aire libre.
Contrario a este comportamiento, el Doctor Sigman afirma que “las formas de juego tradicional tienen beneficios ocultos como la mejora del comportamiento de los niños, el incremento de su capacidad para concentrarse, e incluso la mejora de sus aptitudes académicas.
Por todo ello, Sigman, recomienda a los padres limitar el tiempo de juego entre pantallas y compartir este tiempo con actividades que a lo largo de la semana den la oportunidad a los niños de experimentar con el juego en el mundo real.